viernes, 1 de abril de 2016

NUESTROS TERRORES


El miedo siempre ha sido el factor más buscado y, en muchos casos el peor representado, en la historia del cine debido a que el miedo en sí es algo muy, MUY personal. Muy propio, muy de cada uno. Cada persona desarrolla sus propios miedos en referencia a traumas, tanto infantiles como desarrollados a una edad más avanzada, a factores educativos y experiencias que recibe el individuo a lo largo de su vida, sobre todo a temprana edad. La niñez… ¡Oh! La niñez, esa hermosa edad donde absolutamente TODO deja huella en nuestras alocadas cabezas. Esta es una etapa esencial, en la cual cada uno desarrollará sus propios temores, consecuentes a una reacción ante el peligro. Y, es por eso, que cada director lo refleja de un modo u otro en sus películas y lo que consigue que concordemos con el director… o, en el peor de los casos, terminemos con decepción una película, que alguien nos había pintado muy bien. El terror explícito es mucho menos terrorífico que una película de terror que deja más a la imaginación del espectador. Y es debido a que el espectador recreará en su cabeza su propio temor ligado a la ambientación, y demás, que presente la película. Mientras que una película demasiado explícita se la juega intentando sincronizarse con los terrores de cada uno de los espectadores presentes en la sala.


Paranormal Activity 1-2-3
Oren Peli, Tod Williams, Henry Joost, Ariel Schulman
Estados Unidos

Si, el terror es uno de mis géneros favoritos. No, ninguna entrega de la saga 'Paranormal Activity' es mi película de terror favorita. Es mas, las que se filmaron tras las tres primeras me parece que están bastante por debajo de la primera trilogía, la de Katie. Pero hoy no vengo a hablar de las virtudes de este primer arco de la saga sino de la experiencia terrorífica que supuso un visionado algo especial de estas tres primeras películas. Bueno, o casi, por que no pude completar la maratón dado la paranoia que me dio. Eso era, una simple maratón de 'Paranormal Activity' justo cuando se estrenó la cuarta parte. Ya las había visto pero esta vez quería hacerlo en BR y con el sonido a todo trapo. Recuerdo que la familia se fue y disponía de toda la casa para mi solo. La primera parte pasó bastante bien salvo por el momento en que 'sacan' a Katie de la cama tirando de su pierna; en la segunda empezó mi 'locura'. En esta parte hay un perro. Yo tengo un perro y os aseguro que esto me influyo muchísimo a la hora de prestar atención a las partes que implican al animal sobre todo en la que es engullido literalmente por el sótano y esos gritos..., destaco una sola escena en ambas pero podría hacerlo con mas fácilmente. Llegó el momento de la 3a y ya la luz del comedor, donde tenia instalado mi 'búnker' particular, estaba encendida y no tuve narices a moverme para apagarla. Seguí y me dispuse a ver la 3a parte y ahí me quede, primero normal, luego le quite el volumen porque...claro, si pasaba algo en el resto de la casa no lo oía así que estaba mirando la pantalla y pendiente de la cristalera del recibidor a través de la cual se veía el pasillo, en absoluto silencio, me quede inmóvil, no me atrevía ni a levantarme para abrir esa puerta y prender la luz, tenia un miedo que ni yo mismo me creía. Paré la película tras la escena del tirón de pelo, entre esa, la del baño y el arañazo, la de la cocina con los trastos cayendo o la del fantasma con la sabana, no pude mas y la paré. No tenia agua ya, mis labios resecos como suelas de zapatillas, la luz prendida y viendo Teletienda, dibujos, noticias 24h, lo que fuera ruidoso con tal de no pensar en nada porque realmente estaba asustado de mi propia obsesión. No entendía como habiéndolas visto antes podía pasarme aquello. Algo parecido me ocurrió con la primera vez que vi 'The Blair Witch Project' en un cine, un miércoles en la primera sesión de las 16h, solo, os aseguro que no había absolutamente nadie y cuando llego la escena del ataque a la tienda de campaña con esas voces de niños, lo pase muy mal al igual que en el final en la cabaña. Se podría pensar que es algo relacionado con el found footage pero no estoy del todo seguro porque no me pasa con todas ni tampoco se trata de ser el primer visionado como me paso con 'Paranormal Activity'. Ahora que recuerdo, tuve otro episodio extraño con esta saga, exactamente con la 5 parte, la 'latina'. Fui al preestreno con mi hermana y, a los 30 minutos mas o menos de empezar, el estomago y la cabeza iban cada uno por su lado, me estaba mareando de una manera brutal, pensé en aguantar pero fue imposible, en ese momento miré a mi hermana y ella estaba igual, mareada y pálida, nos miramos y nos fuimos. Otra de las teorías que tengo une un sueño recurrente que tuve de pequeño con una de las escenas de la primera parte de 'PA', justamente en el final, cuando Katie sube las escaleras. De pequeño dormía en una habitación pegada a la puerta de la escalera en un primer piso de un edificio de 5 plantas, en mi sueño, un ruido fuerte me despertaba y oía los pasos de alguien subiendo las escaleras muy lentamente. En ese momento veía la luz de la escalera encendida y el ruido de las pisadas mas fuerte, la puerta de mi casa no estaba cerrada, tenia que llegar a cerrar antes que quien estuviera subiendo porque iba a matarme. Intentaba moverme y no podía, era como estar encerrado en un cuerpo muerto, mientras, lo que fuera, seguía subiendo, de repente podía moverme pero muy muy lentamente, mucho mas que quien subía, no me daba tiempo a cerrar la puerta, lo sabia pero aun así seguía hacia la puerta arrastrándome e intentado llegar. Cuando llego a la puerta mi velocidad se realentiza de nuevo y no puedo moverme, estoy allí de pie, con la puerta abierta y viendo que quien sube, lo hace con un cuchillo enorme. Y bueno, cuando me corta el cuello me solía despertar. Ese alguien que subía y Katie subiendo quizás tengan algo que ver o quizás no, o quizás todavía me dure la paranoia. Who knows??!!


The Exorcist - William Friedkin - Estados Unidos

Me veo con claridad con 14 años viendo con mi hermano de 12 'The Exorcist'. Habíamos alquilado la película de forma subrepticia en el videoclub del barrio sin que nuestros padres se enterasen,y esa fue una decisión de la que nos arrepentimos durante los meses siguiente. Recuerdo la emoción que teníamos ante el reto de enfrentarnos a la que todo el mundo consideraba la película mas terrorífica vista hasta la fecha (durante aquellos años fuimos unos niños bastante temerarios,hay varias cicatrízes que lo corroboran) también nos embargaba ese halo de desafío que suponía llevarle la contraria a tus padres que no te permitían verla ni de coña. Después de aquel visionado, además del consiguiente castigo por desobedecer y pasarnos las advertencias por el forro descubrimos que el arrepentimiento del que hablaba antes era un sentimiento muy profundo,en mi caso teniendo la certeza de que el diablo esperaba en cada esquina y podía poseer mi alma (a pesar de todo fui un niño muy influenciable) y en el de mi hermano arruinando sus dulces sueños de infancia por terribles pesadillas diabólicas, su malsana atmósfera me transporta a esa sensación cada vez que la veo..



Evil Dead - Sam Raimi - Estados Unidos

Una vez más volvemos a mundo viejuno y la nostalgia ochentera. En mi caso los años 80 supusieron un VHS diario alquilado en cualquiera de los videoclubs del barrio. El género del filme daba lo mismo y salvo en un par de ocasiones nunca fui censurado a la hora de ver cualquier tipo de película. Pues bien, hoy hablaré de uno de esos dos filmes que no pasaron el visto bueno de mis padres (el otro, como decían en 'Conan', es otro historia). Una tarde como otra cualquiera mi hermano llegó del videoclub con una nueva película: 'Posesión infernal'. El título ya acojonaba por si mismo. Toda la familia se sentó a verla esa misma tarde. Todos, excepto yo, que fui desterrado a mi habitación sin opción a réplica (creo que las noches que pasé sin dormir a causa de la escena de las cucarachas en 'Creepshow' tuvo la culpa). Me rió del 'una imagen vale más que mil palabras', no os podéis hacer una idea del miedo que pasé desde la soledad de mi habitación. La música de LoDuca y el sonido ambiente empezó a sugestionarme. Los diálogos no me llegaban con claridad y lo único que acertaba a escuchar eran los gritos de los protagonistas.  Sin tener idea del argumento, ni imágenes que apoyaran lo que estaba escuchando, yo me iba poniendo en lo peor. Me imaginaba hordas de fantasmas, zombies, vampiros y demonios que atormentaban a unos pobres incautos. Aún así, lo peor estaba por llegar: LA NOCHE. Y, ¡jo, qué noche! Creo que no pegué ojo, cagado de miedo como estaba, me la pasé la escondido entre las sábanas esperando que amaneciera y acabara mi suplicio. Por lo tanto, es curioso afirmar que la película con la que más miedo he pasado fue justo una que solo 'escuché'.


Sinister - Scott Derrickson - Estados Unidos

Yo creo que la sensación de terror que te puede crear un película depende mucho de las condiciones y del entorno en el que puedes verla. No es lo mismo verla en casa solo por la noche o verla en un cine lleno de adolescentes que no se callan ni un puto minuto. Evidentemente todos hemos mirado bajo la cama después de ver 'El Exorcista' o nos hemos cagado de miedo con Jack Nicholson en 'El Resplandor', pero yo voy a hablar de mi experiencia con 'Sinister'. No es la película que más miedo me ha dado, ni quizás este entre mi top-20 de filmes terroríficos, pero las condiciones en las que la vi por primera vez fueron especiales y dejaron en mi una sensación de angustia bastante grande. Fue en el Festival de Cine Fantástico de Sitges en 2012. Fue un día tremendo. Por la tarde vi dos películas que no recuerdo demasiado en el Auditori y baje al centro a ver la Zombie Walk, pero una tormenta apocalíptica, de las peores que yo he soportado, nos sorprendió delante la Iglesia y me quede aislado con mas de cien personas allí. Las calles eran auténticos ríos, y no exagero. El paraguas no servía de nada por el vendaval que hacía. La oscuridad invadió Sitges. El mar daba autentico miedo. Parecía una escena sacada de 'El día de mañana'. En la plaza había más de un palmo de agua, ya que los desagües  no daban abasto. Me llegaba hasta el tobillo. Quede empapado de arriba a abajo y sin nada para cambiarme. Duró más de una hora. Compre una camiseta del Festival, me fui al coche y intenté secarme un poco, pero fui a la sesión de la noche, sobre las 11, con la humedad impregnada en todo el cuerpo y una sensación de frío tremenda. La sesión empezó con un silencio sepulcral en el Auditori, de las veces que más lo ha estado. Y no sé porqué, pero conseguí entrar mucho en la película y combinado con el silencio de una sala con 1200 personas, solo interrumpido por la chica de detrás mío, con uno de los mejores gritos que oído en el Festival aplaudido por todo el Auditori, produjo en mi una sensación de angustia y nerviosismo que he experimentado pocas veces en una sala. La escena del primer visionado del video del personaje de Ethan Hawke o cuando el niño sale de la caja me produjeron un acojonamiento considerable. Terminé la sesión angustiado, mojado y me fui a buscar el coche que había dejado en una urbanización muy solitaria de la parte alta y que con la tormenta de agua y viento, estaba llena de charcos, hoja y ramas caídas de los arboles. Diez minutos a pie sin nadie a mi alrededor por calles frías, poco iluminadas y húmedas, y yo con la paranoia mirando para todos lados. Llegué a una rotonda y oí un ruido que se acercaba hacia mi y esperé. Llegó a mi altura y me saludo un chico montado en moto disfrazado de zombie, pero con el maquillaje absolutamente corrido por la lluvia, y el disfraz mojado. Nos miráramos, nos reímos, y yo me fui corriendo al coche y salí pitando hacia mi casa. La segunda vez que vi 'Sinister' no me produjo ninguna sensación especial. Por eso, como dije al inicio, creo que esa sensación de miedo depende mucho de las condiciones mentales y del entorno en que ves una película. 


The Blair Witch Project
Daniel Myrick, Eduardo Sánchez - Estados Unidos

Hay mucha tela que cortar a la hora de hablar de 'The Blair Witch Project', sin duda una de las pioneras del subgénero found footage (quizá junto con 'Cannibal Holocaust'), y la que hizo que el boom por este estilo de cine comenzara a crear tendencia y captar a millones de adeptos. En el día de su estreno ya dió muchísimo que hablar, gracias a un impresionante marketing viral que consiguió crear un hype bestial, ya que se orientó en dar credibilidad a la historia, como si de unos hechos reales se tratara... 'En octubre de 2004, tres estudiantes desaparecieron en los bosques de Burkittsville, Maryland, mientras rodaban un documental. Un año después, se encontró esta película'. Recuerdo ver la película el día del estreno siendo apenas un adolescente, era la primera película que veía en este subgénero y el marketing hizo que por un momento me creyera todo eso de los jóvenes desaparecidos en los bosques de Maryland. Con la excepción de 'The Entity', película con la que también lo llegué a pasar realmente mal, ninguna otra me había producido tal tensión y angustia en una sala repleta de personas. Ya de entrada el formato hace que te sumerjas de lleno en la historia, junto con unas interpretaciones por parte de los actores muy naturales, que hacen que te identifiques con ellos y sientas verdaderamente sus miedos. No hay nada que pueda dar más miedo que un bosque en plena noche, y es que yo me removía en mi asiento cada vez que los protagonistas debían parar para acampar, ya que era en ese instante cuando los momentos de mayor tensión salían a la luz. No podía soportar no ver lo que supuestamente los personajes veían en esas terroríficas noches, te guiabas por sus miradas y sollozos, algo que hacía que apartara la vista de la pantalla y me fijara en las demás personas, supongo que para comprobar que todo estaba en orden, era una tensión insoportable. Escenas como la de los niños aporreando la tienda de campaña, o la protagonista corriendo a través del bosque sin saber a donde ir, se grabaron a fuego en mi retina. Acabó la sesión y la sala se quedó completamente fría, ni un murmullo, recuerdo que no encendieron la luz al terminar y para salir tuvimos que guiarnos por las pequeñas luces que adornaban el suelo de la sala. La tensión que viví durante la película luego se traslado a mi vida cotidiana, pasé una semana sin poder dormir mirando de cara a la pared de mi habitación, la escena final me dejo tan shockeado que era imposible, esa escena en la que uno de los protagonistas está de cara a la pared esperando a ser ejecutado por la bruja, tal y como se relataba al principio de la película. Llegué a tener pesadillas incluso, en las que veía continuamente una serie de figuras parecidas a muñecos vudú hechas de palos y ramas, como las que mostraba la película. Solo la he revisionado una vez desde entonces, ya que era mucho el respeto que tenía por esta película... sin duda una obra de terror que se quedará para siempre en mi mente de cinéfilo.



The Strangers - Bryan Bertino - Estados Unidos

Está claro que en esto del cine de terror todo es subjetivo. Realmente desde pequeña siempre me han apasionado las películas de terror, quizás por aquello de la prohibición y la típica frase de ‘eres demasiado pequeña, eso son películas para mayores’. Así que desde que me acuerdo, siempre veo toda película de terror y suspense que caiga en mis manos por mala que sea, o por mala que me digan que sea, ya sabéis, todo es subjetivo. Y eso me ha llevado a crear maratones de películas de terror con mis amigos. Es gracioso que cuando nos juntamos todos en el salón a oscuras, rodeados de bowls de palomitas, la única que se divierte realmente viéndolas soy yo, pero sobre todo porque disfruto viendo el terror que despiertan en los demás. Por ello, todos los 31 de Octubre, como bien se merece, preparamos una noche de Halloween de lo más terrorífica posible. Nos lo curramos de verdad, decoramos el salón, compramos gominolas con formas de esqueletos, calaveras, bichos... hacemos una gran cena y como marca la tradición de los maratones de películas de terror, en el chesslong, nos tumbamos haciendo un buen Tetris, para que todos puedan agarrarse unos a otros en los momentos de mas tensión, esos en los que la música hace que la piel empiece a ponerse de gallina y sepas que llega lo peor. Hace unos años me propuse hacer algo genial y llegó a mis manos ‘Los Extraños’. Solo con titulo y la carátula del DVD supe que conseguiría acojonarlos a todos de verdad. Durante la cena estuvieron preguntándome y yo divertida, solo sonreía y les contestaba que ya llegaba que tuvieran paciencia. Cuando comenzó la película todos caímos en cuenta que la casa estaba alejada y en mitad del monte, exactamente igual que cuando vamos a pasar los fines de semana a la parcela.. La tensión comienza entre todos cuando suela puerta y preguntan por Tamara. Según los protagonistas iban poniéndose más nerviosos, nosotros íbamos enderezándonos mas en el sofá, hablábamos con la televisión, diciéndoles una y otra vez que estaban ahí, justo detrás.. y es que no hay nada peor que ver como pasan por delante sin verlos y empiezan a correr! En ese momento estábamos ya todos sentados erguidos en el sofá la tensión de ver como les van a coger no nos dejaba relajarnos y entonces, algo que no había ocurrido nunca, el terror de mis amigos, me invadió y era como estar dentro de la película. Todos mirábamos cada sombra que aparecía en el salón, escuchábamos golpes en las ventanas, incluso llegaron a llamar a la puerta a golpes! Conseguimos por los pelos terminar de verla entera, ni si quiera al verlos marchar respiramos tranquilos. Creo que a día de hoy, no es ni por asomo mi película de terror favorita, ni es la mejor que he visto, pero si consiguió ser la que mas terror despertó en mi. Aun después de los años que han pasado, cada vez que vamos a la parcela alguno de nosotros llama a la puerta a golpes preguntando por Tamara, a sabiendas que el resto pegaremos un brinco.

  
Ringu - Hideo Nakata - Japón

He de decir que no soy un gran fan del cine de terror, aunque tampoco reniego de este género, esto es como todo si una película está bien hecha y tiene algo interesante que contar en verdad da igual el genero que sea, a lo que me refiero es que no soy de los que ven una película solo para pasar un rato de miedo o de angustia, me gusta que tengan algo más. Entre los filmes que más miedo me han hecho pasar se encuentran 'The Exorcist', 'The Blair Witch Project' (ya comentadas por mis compañeros en esta sección) y la que voy a comentar a continuación, la japonesa 'Ringu' o como es más conocida en occidente 'The Ring'. Todavía me acuerdo cuando me la recomendaron para ver porque daba mucho miedo y yo pensando para mí: 'pues mucho miedo no puede dar, es una película japonesa ¿como va a acojonarme una película que viene del país que ha creado a Doraemon, Pikachu o al bueno de Songoku?'. Bueno, pues fue ponerme a verla y pasar uno de los peores ratos de mi vida. 'Ringu' no entra en el juego de crear tensión y buscar el momento más propicio para asustarte y repetir esta técnica cada dos por tres, es un terror más psicológico, aunque no exento de esos dichosos sustos. Lo que me sorprendió de esta cinta y que ayuda a crear este terror es como una cosa tan cotidiana e inocente como una cinta de vídeo se puede convertir en objeto de tanta maldad y producir tanto temor. esa es una de las claves de la película. Otra cosa que siempre me ha dado mucho yuyu son los espejos, eso de que mires a un espejo y veas reflejado algo que no debería estar ahí es una de las cosas que más acojonan. Por último y quizás lo que mas aterra de este filme es la imposibilidad de escapar del horrible destino que te espera si has visto la dichosa cinta, eso de saber que hay algo que te persigue y que no vas a ser capaz de escapar de ello es totalmente angustiante, pasa en filmes como 'Terminator' algo que es imparable va detrás de ti y parece que no hay nada que puedas hacer para evitarlo solo que en el caso de 'Sadako' lo que te persigue es un ser sobrenatural y misterioso y realmente no hay escapatoria alguna. Y joder, el aspecto de la niña, con ese pelo lacio tapándole la cara, esos movimientos espasmódicos, esas uñas arrancadas y el camisón raído, aparte de aparecer en mis peores pesadillas se ha convertido en una de las imágenes más icónicas del cine de terror. 


Carrie - Brian de Palma - Estados Unidos

Para este especial 'Nuestro terrores', seleccioné una película que, desde la primera vez que la vi, sigue provocando en mí esos mismos estremecimientos que me causó en la niñez y con el paso de los años se convirtió en uno de mis films favoritos. Se trata de 'Carrie', el nombre que también lleva su protagonista Carrie White (Sissy Spacek). Aclaro que en esta oportunidad, mi reseña está basada en la versión de la película estrenada en el año 1976, dirigida y producida por Brian De Palma, es importante hacer esta aclaración, ya que luego llegaron remakes, secuelas… que en mi opinión son resultaron totalmente mediocres. Mi elegida es la adaptación de la novela de Stephen King (que con el tiempo se convertiría en uno de mis predilectos autores del género de terror, que con sus libros ocuparía gran parte de mi biblioteca). Pero vuelvo a la película que en esta ocasión elegí como la que causó más impresión y terror en mi niñez. Fue una noche, pasando por cada canal en la tele que me encontré con Carrie, fue desde ese momento en que vi los ojos de esta chica, quedé prendida, hipnotizada y sabía que esta muchacha pelirroja, con pecas y con un aspecto muy particular… algo ocultaba. Carrie no era una chica 'normal', era víctima de Margaret (Piper Laurie) una madre obsesionada por la religión, esa madre que influía sobre el proceso de desarrollo y de adaptación social de su hija, es así cómo Carrie se convierte en una adolescente extremadamente introvertida, con miedos y que sufriría las burlas de sus compañeros… en definitiva era atormentada por aquello que hoy en día se denomina 'bullying'.  La mayor humillación la viviría en el Baile de Graduación. Carrie, es invitada por el muchacho más popular del colegio, provocando en ella una ilusión muy grande reflejada en la sonrisa. Sin embargo, su madre, con argumentos fundamentados en sus obsesiones religiosas, le prohíbe la asistencia a ese baile. Utilizando sus poderes telequinéticos, Carrie logra huir y llegar a la fiesta, donde sufre la mayor humillación. Mientras es coronada como la Reina del baile, no sólo recibe una brillante corona… al mismo tiempo es, literalmente, coronada con sangre de cerdo preparada por sus compañeros. Ese es el momento culmine en el que Carrie se convierte en víctima de la burla de todos, la situación provoca la ira de ella. Allí es cuando las risas se convierten en gritos, Carrie hace uso de sus poderes psíquicos para vengarse, provocando una catástrofe. No voy a seguir describiendo el argumento. Creo que esta película me marcó por varias razones, ya que los terrores que causa, pueden dividirse entre lo vivido que provoca lo cotidiano (Carrie víctima de la religiosidad de su madre, las burlas constantes de sus compañeros) y los terrores explicitados en la venganza,  la sangre, las violentas muertes. El filme ha dejado imágenes icónicas que perduran a través de los años. Sin tomarlo tan seriamente, en algunas ocasiones… ¿quién no ha fantaseado con tener los poderes de Carrie…?

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